¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Ambientación

Innumerables son las historias que conocemos, de seres mágicos, mundos lejanos, incluso dimensiones paralelas. ¿Qué pasaría si te digo que todo lo que has oído es real?. Si, todo es real, y está a solo un paso de distancia.

Hace mucho tiempo la gente que dominaba la magia y hechicería tuvo ambiciones destructivas para con si mismos y el mundo, pensaron que al poseer dicho conocimiento serían seres casi omnipotentes, lo que ellos no conocían era que al abusar de ella, las barreras que mantenían a los mundos separados comenzaron a unirse gracias a la oscuridad que crecía en los reinos por estos abusos.

Hoy en día cualquier raza puede encontrarse en cualquier reino, ya que las brechas espacio tiempo creadas por la oscuridad, las cuales todos conocen como Portales, les permiten viajar entre ellos, aunque todo viaje tiene sus consecuencias...

Últimos temas
» En qué estás pensando.
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptySáb Abr 27, 2019 6:28 pm por Klaus [Skiadrum]

» Bonjour ma petite fille. [Privado|Rosie]
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyVie Feb 10, 2017 5:25 am por Aleksandr Bozkurt

» Confieso que
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptySáb Ene 14, 2017 6:09 am por Rosie

» Una tarde afortunada. [Privado-Rosie]
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyJue Ene 05, 2017 9:13 pm por Rosie

» Habilidades Aprobadas
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyVie Nov 11, 2016 6:53 am por The Author

» Ronda 1, Dupla 3 vs Dupla 10
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyVie Nov 11, 2016 2:36 am por Jeanne D'Arc

» Presentación || [Privado con Participantes]
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyVie Nov 11, 2016 2:03 am por The Author

» Ronda 1, Dupla 6 vs Dupla 7
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyVie Nov 11, 2016 1:54 am por The Author

» Ronda 1, Dupla 5 vs Dupla 8
Elizabeth Báthory - Vampiresa EmptyVie Nov 11, 2016 1:53 am por The Author

Administración
The Author
Magic Quill
Administrador
Enviar MPVer perfil
Alioscars
PJ masculino
Kristoff
Mejor tema
WYD
Mejor pelea
We'll have to hurt for now
Pj femenino
Caliel [Chesire]
La heroína
Rhiannon
El villano
Hayate Tsubasa
Moderadores

Competidores
Créditos
Skin hecho por Hardrock de The Captain Knows Best.

Into the Darkness is licensed under a Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional LicenseEste foro es responsabilidad de la Administración y los moderadores, los elementos utilizados en los documentos de cada raza fueron obtenidos en gran parte de libros de rol de mesa, las imágenes fueron obtenidas de Google, tumblr y bing.

Elizabeth Báthory - Vampiresa

 :: Personajes :: Fichas :: Aprobadas

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Ir abajo

Elizabeth Báthory - Vampiresa Empty Elizabeth Báthory - Vampiresa

Mensaje por Elizabeth Báthory Lun Sep 26, 2016 6:47 am

Edad: 456
Ocupación: Modelo
Nacionalidad: Húngara
Avatar: gigi Hadid
Raza: Vampiresa
Habitante de: Mundo
Elizabeth Báthory
No hay pecado más grande que romper aquello que es bello.

Psicología

Sádica y mentirosa, retorcida y peligrosa. No conoce el remordimiento y muchos creen que realmente nació sin conciencia, no le importa nadie que no sea ella y casi el cien por ciento de quienes la rodean sólo son medios a través de los cuales consigue sus metas, pero como todo en la vida es más hermoso cuando es irónico, tiene una increíble capacidad de amar, ama hasta que le duele, de hecho prefiere que duela, eso si, nunca ha encontrado a alguien a quién pueda amar más de lo que se ama a sí misma.

Historia

Desde mi nacimiento estuve destinada a la grandeza, nací en una de las grandes familias de Hungría, en la más poderosa, la más fuerte, la más violenta. Mis hermanos eran seres toscos y quien los observaba deseaba no haberlo hecho, yo en cambio fui un soplo de aire fresco para aquel lugar, mi mirada iluminaba los corazones de todos aquellos que llegaban a posar sus ojos en mi, mi sonrisa los hacía suspirar, mis ojos les daban esperanza de un futuro mejor para nuestro pueblo. Mientras crecí descubrí que en esta vida todo sale mejor para quienes son hermosos y a pesar de que constantemente se me repitió que debía luchar por lo que quería por haber nacido mujer la verdad era diferente, nunca me esforcé por nada, las cosas simplemente llegaban, si deseaba algo me lo otorgaban y nadie permitía que la tristeza se posara en mi bello rostro.

Todo era perfecto y deseé que aquello fuese para siempre, pero el destino es cruel y odia a los seres hermosos, nos reciente y por ello a los seis años comencé a sufrir fuertes ataques, violentas convulsiones que se apoderaban de mi cuerpo y hacían que quienes me rodeaban comenzaran a temerme, seguía siendo igual de bella, pero ya no me amaban tanto, yo era defectuosa. Desde entonces mi vida ya no fue igual, no importaba cuanto lo intentara, mi vida había cambiado, las múltiples ofertas de uniones que recibían mis padres por mi mano se redujeron a una, sólo una por parte de mi primo, un asqueroso conde adolescente lleno de acné, de salud frágil y de un rostro que ni siquiera una madre podría amar. Me casé con él, pero nunca lo deseé, él no me merecía, incluso me pidió que tomara su apellido, su apellido ¿Te imaginas? Como si un ser como yo necesitara de su apellido para ser validado, finalmente entró en razón y tomó mi apellido.

Mi esposo era un hombre de guerra, lo que me agradaba mucho, porque significaba que pasaría más tiempo fuera que dentro de nuestro hogar, pero eso no le impedía reclamar sus derechos maritales. Muchas veces tuve que fingir que disfrutaba de su desagradable tacto, era horrible, tanto que luego de que se iba lloraba escondida en mi habitación rogando a Dios que me librara de aquella tortura, pero Dios jamás respondió ¿Acaso no es esa la historia de todos los humanos? Dios nunca responde, no le importa lo suficiente.

El tiempo comenzaba a pasar cada vez más rápido y mi reflejo en el espejo comenzaba a molestarme, estaba envejeciendo y el tiempo no perdona a nadie, a menos eso es lo que nos cuentan nuestras madres. Las palabras de mi progenitora me perseguían incluso en sueños, algún día toda mi belleza se extinguiría y entonces ¿Qué me quedaría? Un esposo que no amaba, tres hijas que no deseé y riquezas que no sentía mías, no era suficiente.

Un día mi esposo volvía de una batalla y estaba herido, más que nunca. Estaba segura de que moriría esa misma noche, pero los doctores nos daban aliento, como si yo los necesitara. Esa noche fue la primera vez que arrebaté una vida. Tomé una almohada y la presioné contra su rostro hasta que él dejó de moverse, lo que sentí cuando todo hubo terminado fue un placer que jamás había conocido, era libre, al fin. Lo siguiente fue deshacerme de mi suegra y sus sirvientes, eso no me costó mucho, sin su hijo en el castillo ella no tenía razón para quedarse, sus sirvientes la siguieron y dos de mis hijas se fueron con ella, ojalá se hubieran ido las tres.

Ana, la mayor, se quedó conmigo como si me estuviera haciendo un favor. Ver su horrible rostro día y noche sólo me recordaba como mi vida había sido arruinada, como tuve que casarme con su padre, como perdí mis sueños, pero un día Ana llegó con un nuevo rostro, se veía hermosa, se veía como... como... como yo. La abracé como nunca y reímos, ella me contó que una hechicera la había vuelto hermosa y que su único deseo había sido verse como su madre, estaba tan radiante que no pude evitar sentir pena por mi, por mi perdida y malgastada juventud, pero Ana no me permitió sentir tristeza, en cambio me llevó con la hechicera y allí mi vida comenzó de nuevo.

Siete hechiceras llegaron a vivir en mi castillo y comenzaron a practicar allí su magia, les permití hacer y deshacer como ellas estimaran conveniente, a cambio mantenían a mi hija hermosa y poco a poco me devolvían los años que había perdido, pero el proceso era lento, doloroso, extenuante hasta que una de ellas me dijo que había otra forma, una mucho más rápida, mucho menos terrible para mi, lo único que debía hacer era conseguir jóvenes vírgenes y drenarlas, sacar de ellas hasta la última gota de sangre. La idea me horrorizó, claro está, pero algo dentro de mi comenzó a cosquillear, ese placer que sentí al matar a mi esposo, ese placer dulce y cálido ¿Se sentiría igual si quitaba la vida a alguien que no conocía? Necesitaba saberlo, necesitaba apartar esa duda de mi corazón y sólo por eso invité a las hijas de algunos granjeros a mi castillo, hijas de los sectores más pobres, esa clase de jóvenes que si desaparecen a nadie le importan, pensé que una o dos serían quienes aceptaran, pero para mi asombro todas llegaron, cincuenta tiernas señoritas, aunque ninguna de ellas tan bella como yo o como mi Ana.

Nunca fui una guerrera, esas mujeres carecen de mi delicadeza y mi cutis, así que simplemente di la orden a la cocinera de que mezclara algunas hierbas con los alimentos de esas pequeñas, todas y cada una de ellas cerraron los ojos y quedaron inconscientes por suficiente tiempo como para poder llevar a cabo mi tarea. Como soy una mujer muy eficiente no permití que nadie me ayudara, una a una las tomé entre mis brazos y corté sus cuellos mientras mis sirvientas recolectaban la sangre en diversas cuencas. Luego de que lo exigente concluyó las hechiceras me indicaron que era necesario llevar esa sangre a una bañera, verterla allí y bañar mi cuerpo en ese líquido carmesí, lo hice movida por una obediencia que sentía por lo que habían hecho por mi hija y por mi, estaba algo asustada, como dije yo nunca he sido una guerrera, así que nunca había visto tanta sangre. Me bañé más o menos por diez minutos, no más que eso, pues esa fue la indicación que recibí y para mi sorpresa mi piel se volvió más tersa, más clara, más joven.

No podría expresar con palabras lo que sentí, era como si la vida me estuviera dando una segunda oportunidad, incluso mis ataques comenzaron a desaparecer, estaba feliz, tanto que tuve que repetir ese baño al menos una vez a la semana y todo iba bien, hasta que los rumores de mi recuperada belleza y juventud llegaron a oídos de uno de mis primos, uno que siempre me había odiado. De inmediato comenzó una investigación al rededor de mi castillo y como nunca invertí en fuerzas militares no había nadie que me defendiera, mi hija, mi adorada hija Ana no pudo con el miedo y se quitó la vida, las hechiceras desaparecieron y fui condenada por la muerte de las jóvenes que servían para llenar mis baños.

Mi castigo fue el peor de todos, me encerraron en mi castillo, en mi habitación, pero sellaron las puertas y las ventanas y sólo me alimentaban con asquerosidades, nadie me hablaba, nadie me veía, estaba completamente sola hasta que encontré el diario secreto de mi difunto esposo y por primera vez sentí que ese hombre me daba un regalo. En su diario leí una hermosa leyenda que hablaba del Señor de las Sombras, un ser capaz de conceder cualquier deseo si eres capaz de dar algo a cambio, incluso en el diario estaba escrito como debía invocarlo, de inmediato lo hice, seguí una a una las instrucciones y por horas nada hasta que me rendí y me quedé dormida. Cuando desperté un niño pequeño acariciaba mi cabello, los ojos del niño eran verdes como las más hermosas esmeraldas, sus labios eran rosados como pétalos de cerezo, su piel blanca como la leche y su cabello lleno de risos dorados, el niño se acercó a mi oído y me susurró hermosos secretos, me pidió algo muy simple y yo le juré por mi alma que cumpliría su petición, fue entonces cuando me besó la frente y un estruendo se escuchó en la habitación. Dirigí mis ojos al ruido, asustada contemplé el cuerpo de un hombre alto, pálido y siniestro. Busqué con mi mirada al niño, pero ya no estaba y antes de que pudiera hablar el hombre que había llegado me tomó entre sus brazos y llevó su boca a mi cuello, mordió tan fuerte que pensé que destrozaría mi garganta, bebió de mi hasta que se cansó y luego me arrojó en mi cama. Estaba tan cansada que no podía abrir los ojos y sólo sentí como acercaba algo a mi boca y me obligaba a beber... sangre, nunca olvidaré ese sabor. Ya había probado antes la sangre en mis baños, pero nunca había saboreado sangre como esa, era deliciosa, era diferente. Luego de eso me desmayé y cuando por fin recobré la consciencia estaba en otro lugar, en otro castillo, en otra cama.

¿Qué más puedo decirte? Soy lo que la vida ha hecho de mi y esta es mi verdad, hay otras versiones, pero ¿A quién vas a creer, a los historiadores o a la protagonista?

Otros y/o Exclusivos Quimeras

{♠} Gustos: Todo aquello que considere bello.
{♠} Disgustos: Lo horrible, los hombres que se aprovechan de las mujeres hermosas.
{♠} Fobias: Teme a la muerte y a envejecer.
{♠} Otros: Limó sus colmillos ya que no le gusta como se ven y cuando debe saciar sus apetitos prefiere herir a sus víctimas con objetos cortopunzantes en vez de morderlos. El sol no le hace daño debido al pacto que tiene con el Señor de la Oscuridad. Su apariencia es la que ostentaba en sus veinte.
© HARDROCK
Elizabeth Báthory

Elizabeth Báthory
Vampiro 1
Vampiro 1

Puntos de Vida :
30

Mensajes :
14


Volver arriba Ir abajo

Elizabeth Báthory - Vampiresa Empty Re: Elizabeth Báthory - Vampiresa

Mensaje por The Author Lun Sep 26, 2016 9:13 pm

Elizabeth Báthory - Vampiresa Ei1340
The Author

The Author
Admin
Admin

Puntos de Vida :
Indefinidos

Mensajes :
208

Localización :
Omnipresente


https://intothedarkness.foroes.org

Volver arriba Ir abajo

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Volver arriba

- Temas similares

 :: Personajes :: Fichas :: Aprobadas

Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.