Abierto - Relax

En el mundo humano las noticias corrían como pólvora, recientemente se escuchaba mucho hablar de unos portales misteriosos que aparecían en algunos lugares, que no sabían que era, muchos hasta asociaban eso con aliens incluso seres demoniacos. Eso solo causaba gracia en Asmodeo, a pesar de vivir ya varios años en aquel mundo seguía sorprendiéndose de la ingenuidad de estos y de lo dramáticos que podrían llegar a ser. Pero no negaría que en cuanto aquellas noticias llegaron a sus oídos creció una enorme curiosidad en el. Sabia el significado de los portales, no muchos seres tenían el poder de hacerlos, por lo que se puso a investigar un poco sobre esos portales, muchos decían que solo se aparecían frente a gente que estaba en una etapa terminal, otros que solo se hallaban en lugares corrompidos y con energía negativa en exceso. Opto por la segunda opción, le era la más lógica sabiendo su propia naturaleza, en esos momento agradeció que estuviera fuera de Corea, ya que en este país la delincuencia era casi nula y eso le enfermaba un poco por lo que pasaba más tiempo en otros países que en su país de origen.

Ese día estaba en USA para ser exacto en las vegas, le gustaba apostar, eso no lo negaría y aparte que mejor ciudad para encontrar un portal que esa, la famosa ciudad del pecado. Lo único que hizo fue caminar a media noche en busca de una mayor concentración maligna, no dudo en adentrarse,  a un lugar desholado donde fue testigo de la pelea de unos borrachos. —Pateticos.— Pensó a medida que caminaba hasta que algo en un callejón llamo su atención, no solo por la energía si no por una sutil luz que brillaba en ese lugar. A paso firme se adentro a ese lugar encontrándose con un portal frente a el. Había sido más fácil de lo que había imaginado, dio un vistazo al portal buscando poder ver a que lugar estaba conectado pero no podía ver nada. Suspiro con molestia y dio un ultimo vistazo a sus alrededores para verificar que nadie lo viera. Una vez listo se adentro a aquel portal llegando rápidamente a un lugar, no lo reconocía, todo era muy distinto, incluso el ambiente había cambiado, todo parecía tan calmado, tan natural y eso era obvio, se encontraba rodeado de arboles, sin duda ese lugar había llamado su atención, había algo en el que lo invitaba a seguir explorando y no se iba a negar a esto. Se quito su saco y lo dejo en la rama de un árbol, así recordaría el lugar por donde vino si es que este no salia volando, jalo su corbata dejándola a medio amarrar y des abotonó los primeros botones de su camisa. Una vez "listo" comenzó a caminar por aquel espeso bosque, podía escuchar sus pasos y una que otra ave, todo ese ambiente lo había relajado, quería conocer a fondo ese lugar y no se iría sin conocer si quiera la mitad o una cuarta parte de este, quizás podría encontrar un poco de diversión en un lugar nuevo, no iba a descartar la idea.