Anton Kähler / Licantropo

{♠} Edad: 37
{♠} Ocupación: Cantante
{♠} Nacionalidad: Finlandes
{♠} Avatar: Adam Levine
{♠} Raza: Licantropo
{♠} Habitante de: Mundo





Anton es un ser amable, gracioso y preocupado por los demás independiente de lo que le puedan hacer, tiene un corazón grande para todos. Es serio muy pocas veces, sólo cuando la situación lo amerita pero el resto del tiempo siempre lleva una sonrisa en su rostro.
Es celoso de sus relaciones, no le gusta compartir familia, amigos o lo que sea que él ame, aunque no hace escándalo, ni se lo toma mal pero aún así es bastante posesivo sin llegar a extremos que sean insoportables.
No suele enojarse ni molestarse pero cuando lo hace toda la simpatía desaparece, no se vuelve cruel pero sí llega a ser muy hiriente en sus palabras, no se mide pero puede llegar a calmarse pero depende de su juicio si va o no a pedir disculpas de sus actos.
Pero en general es un buen lobo quiere mucho a quienes lo rodean y no daña a nadie. Habría que molestarle mucho para que rechace o discrimine a alguien pero como eso no pasa, cualquiera se le puede acercar y recibirá una sonrisa de parte de Anton.




Anton es el hijo mayor de un garou y una humana. Tuvo dos hermanos menores con los cuales se crió en Rovaniemi, Finlandia. Allí donde todos los días eran invierno fue donde comenzó todo. El mayor de los hijos siempre se destacó en sus habilidades como garou al igual que la menor pero al ser tan pequeña sólo tenía los instintos muy desarrollados nada más, en cambio el segundo hermano era el más fuerte. Cada uno de ellos se desarrollaba en algo distinto siendo muy buenos en eso pero Anton lo tenía todo, era sumamente fuerte, hábil y de un corazón gigante así que su padre veía en el mayor un líder de manada pues él lo había sido antes de enamorarse de una humana. Su madre por otro lado vivía con ellos, no tenía miedo, sabía perfectamente que nada le pasaría a ella, porque el amor de familia era mucho más grande que cualquier cosa.

Al pasar de los años nada cambiaba, sólo las edades pero las relaciones familiares se mantenían intactas a pesar de el segundo hijo era el más desobediente, nunca se reveló contra su sangre, pues sus padres los criaron de la mejor forma posible. El mundo no era fácil para alguien como ellos, siempre querían ir a la parte humana pero no los dejaban ya que toda una vida se habían criado entre los árboles y la nieve, así que tenían cero comportamiento humano los tres hermanos pero Anton le había prometido a sus hermanos que los llevaría a la ciudad así que de a poco y sin permiso empezó a estudiar a los humanos, su forma de ser era peculiar pero no tan distinta de ellos, sólo tenían un defecto, eran muy desleales entre ellos, vivían en manada pero no se respetaban ni un poco y eso no le gustaba a él como una enseñanza a sus hermanos pero promesas son promesas así que cumplió con su palabra aunque desde el principio les enseñó a los menores que los humanos no eran de total confianza.

El tiempo siguió su rumbo y ya todos eran muy adultos, sus padres estaban viejitos e incluso Anton tenía una novia con la que se quería casar, era una humana al final y a pesar de todo lo que había dicho, el corazón se mandó sólo y terminó por experimentar ese sentimiento llamado amor con un ser que al principio no le agradaba. Nada bueno salió de la relación, muchas eventualidades ocurrieron de allí, su hermana menor murió a manos de un humano, su hermano se escapó porque no podía entender a Anton por no ir a matar a los humanos y su mujer se escapó por miedo a lo que él era. Todo lo bello se fue cuesta abajo, así que ese lobo decidió dejar su animal de lado y volverse humano por mucho tiempo, alrededor de 10 años el convivió con ellos, sin volver a tener un contacto con Gaia.

Viajó por mucho tiempo, distintos lugares fueron su casa y un día en una ciudad conoció a una pequeña loba, muy parecida a su hermana menor que le devolvió las esperanzas, que le hizo sentir nuevamente que ser un garou no es malo, es simplemente su naturaleza y tenía que amar eso. Lamentablemente la dejó de ver pero sabía que en algún momento se volverían a encontrar y en ese lapsus de tiempo él se comenzó a preparar, al igual que un garou recién iniciado, empezó de cero, volvió a los brazos de su madre naturaleza para que lo guiara y aunque en estos momentos no está al cien por ciento de su capacidad, de a poco, con paciencia y amor hacía su raza volverá a lo que era, un garou respetable.




{♠} Gustos: Nadar desnudo en su forma humana, Cantar y tocar la guitarra
{♠} Disgustos: Los mentirosos, la infidelidad de relaciones de cualquier tipo, los ataques gratuitos.
{♠} Fobias: No tiene.
{♠} Otros: Aunque no lo muestra suele tener problemas enormes para tener una pareja. No comprende a las mujeres.